El concepto de “Tercer Mundo”
empezó a manejarse en los medios internacionales desde los primeros momentos de
la postguerra, cuando el avance del comunismo sobre los territorios de Europa
oriental dio como resultado la formación del “Segundo Mundo”, es decir, el
bloque soviético, cuyo creciente poderío le permitiría entrar en competencia
con el “Primer Mundo” capitalista. Ambas potencias EEUU y la URSS se encontraron a la
cabeza del “mundo” respectivo, integrado por naciones-satélites y aliados de
las superpotencias respectiva- -Por otro lado quedaba un conjunto de países,
caracterizados tanto por estar menos desarrollados en materia económica y
tecnológica, como por su neutralidad respecto a las superpotencias,”
Políticas de neutralidad
La política de neutralidad de los países tercermundistas se fundamenta en
la idea de no alineación que surgió también en algunos Europeos, como es el
caso de Yugoslavia en donde el mariscal Josip Broz Tito a pesar de su posición
socialista, se negó a aceptar el dominio del bloque soviético
De manera formal, la política
de no alineación tomó consistencia a
partir de la Conferencia
de Bandung (Indonesia) celebrada en 1955,.. La misma fue de gran importancia
para consolidar la solidaridad de los países del Tercer Mundo y tuvo especial
transcendencia en los movimientos de liberación que condujeron a la
descolonización de numerosos países africanos y asiáticos. A Bandung la
sucedieron numerosas conferencias que trataban la misma problemática, entre
ellas se destaco la Primer Conferencia
de Países No alineados, celebrada en 1961 en Belgrado (Yugoslavia). El bloque
neutralista mostró la firme decisión de intervenir en las grandes cuestiones
internacionales de las que depende la paz
mundial, de dar apoyo a los movimientos de liberación---
La Conferencia afroasiática de Bandung.
La Conferencia afroasiática, convocada por los gobiernos de
Birmania, Ceilán, India, Pakistán, e Indonesia. A tenido lugar en Bandung, del
18 al 24 de abril de 1955. A
demás de los países promotores participaron 24, países más.
Declaración sobre los
problemas de los pueblos dependientes: La conferencia ha discutido los
problemas de los pueblos dependientes y del colonialismo, y los males derivados
del sometimiento de los pueblos a la sujeción del extranjero, a su dominio y a
su explotación. La
Conferencia está de acuerdo:
En declarar que el colonialismo, en todas sus
manifestaciones, es un mal al que debe ponerse rápidamente fin.
En declarar que la situación de
los pueblos al yugo extranjero, a su dominio y a su explotación, constituye una
negación de los derechos fundamentales del hombre, es contraría a la Carta fundacional de la ONU y es un obstáculo para la
consolidación de la paz y cooperación mundial.
Sin embargo los países del
tercer Mundo ubicados en la esfera de influencia del mundo capitalista, a pesar
de que con el proceso de descolonización adquirieron indudablemente la
soberanía nacional, continuaron sometidos a una dependencia económica que
guardaba muchas semejanzas con la que padecieron durante el régimen colonial. A pesar de algunos de
ellos lograron un relativo crecimiento económico interno durante la depresión
de los años treinta y durante la segunda Guerra Mundial, al comenzar la década
de 1950 y aumentar la demanda petrolera de las grandes potencias, los países en
vías de desarrollo volvieron a la situación de abastecedores de materias primas…
Por lo tanto el endeudamiento que
contrajeron los países del Tercer Mundo con las potencias capitalistas
en un intento por impulsar el desarrollo interno, no sólo frenó el
crecimiento al verse obligados sus
gobiernos a dedicar gran parte del presupuesto al pago de la deuda externa,
sino que repercutió sobre la estructura productiva y afectó principalmente al
sector agrícola, ya de por sí deteriorado a causa de las políticas aplicadas al
desarrollo industrial.